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Matagalls 100 Cims FEEC

🥾 Senderismo

📊 INFORMACIÓN GENERAL

📏 Distancia 12.0 km
⛰️ Elevación 810 m
⏱️ Tiempo estimado 4h 0min
🎯 Dificultad Fácil
📍 Ciudad El Brull

📖 DESCRIPCIÓN DE LA RUTA

El Matagalls, con sus 1.697 metros de altitud, constituye una de las cimas más emblemáticas y veneradas del excursionismo catalán, ubicado en el corazón del macizo del Montseny, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Esta ruta circular de 12 kilómetros desde Collformic ofrece una experiencia completa que combina la ascensión a esta cumbre legendaria con la exploración de un itinerario variado que incluye múltiples cimas secundarias, ermitas históricas y algunos de los paisajes más espectaculares del Pre-Pirineo Oriental.

Collformic, situado a 1.142 metros de altitud, sirve como punto de partida ideal para esta aventura. Este enclave montañoso, equipado con restaurante y amplias facilidades de aparcamiento, se ha convertido en un centro neurálgico para los excursionistas que buscan acceder a las alturas del Montseny. La proximidad de la carretera y la disponibilidad de servicios hacen de este lugar una base perfecta para jornadas de montaña familiares o expediciones más ambiciosas.

La ruta se inicia siguiendo las marcas del GR-5-1, sendero de gran recorrido que atraviesa algunos de los territorios montañosos más significativos de Catalunya. Los primeros pasos conducen hacia la Creu dels Carlins, monumento conmemorativo que recuerda uno de los episodios más trágicos de las Guerras Carlistas: el asesinato de 110 hombres por tropas carlistas en 1874. Este elemento patrimonial conecta inmediatamente al excursionista con la historia convulsa del siglo XIX catalán y la importancia estratégica de estos pasos de montaña.

El ascenso continúa por los Roures de Sant Andreu, pequeño pero denso bosque de robles que proporciona las primeras muestras de la diversidad vegetal característica del Montseny. Estos árboles centenarios, adaptados a las condiciones climáticas de la montaña media, crean un ambiente de bosque primigenio que contrasta con las zonas más expuestas que aparecerán en las cotas superiores.

Las Roques del Marqué marcan el inicio de la sección más técnica del ascenso inicial, donde grandes losas de piedra crean un terreno rocoso que requiere cierta atención en la progresión. Esta zona, conocida como Carena dels Roures, ofrece los primeros atisbos de las vistas panorámicas que caracterizan las alturas del Montseny, especialmente hacia el este donde se divisan las comarcas del Vallès Oriental y la Selva.

El Plà de la Barraca, amplio prado situado a 1.364 metros, constituye uno de los puntos más fotogénicos del recorrido. Esta explanada verde, rodeada de elevaciones boscosas, ofrece un contraste paisajístico notable y sirve como mirador natural hacia las cumbres circundantes. Desde aquí, las vistas comienzan a abrirse de manera espectacular, permitiendo apreciar la magnitud del territorio que se extiende en todas las direcciones.

La ascensión al Turó del Plà de la Barraca, primera cima del itinerario a 1.382 metros, marca el abandono temporal del sendero principal para explorar elevaciones secundarias que enriquecen significativamente la experiencia. Esta estrategia de "coleccionismo de cumbres" caracteriza la ruta y permite descubrir perspectivas únicas del territorio montañoso.

La Poua de Neu, pequeña cavidad donde se acumula nieve durante los meses invernales, representa un elemento geomorfológico característico de las altitudes medias pirenaicas. Esta formación natural ilustra los procesos de modelado del paisaje por la acción de los elementos meteorológicos y constituye un punto de interés científico para comprender la dinámica climática de la montaña.

La ascensión hacia el Turó Gros, situado a 1.541 metros, presenta la sección más exigente del recorrido, con senderos verticales que atraviesan terreno árido característico de las exposiciones sur del Montseny. Desde esta atalaya se obtienen las primeras vistas directas del objetivo principal: la imponente silueta del Matagalls con su característica cruz cimera perfectamente visible en el horizonte.

El Turó de Morera, a 1.577 metros, constituye la última elevación significativa antes del asalto final al Matagalls. Esta cima ofrece una perspectiva privilegiada para contemplar el objetivo final y planificar la estrategia de ascensión a través del Coll de Llops, punto de enlace definitivo con el sendero principal que conduce a la cumbre.

La llegada al Matagalls, a 1.697 metros, representa la culminación emocional de la jornada. La gran cruz en honor a Mossèn Cinto Verdaguer, insigne poeta de la Renaixença catalana, y la placa conmemorativa de Mossèn Jaume Oliveres, pionero del excursionismo catalán y creador de la mítica travesía Matagalls-Montserrat en 1904, convierten esta cumbre en un santuario del montañismo catalán. Las vistas desde aquí abarcan un territorio inmenso que incluye desde las cumbres pirenaicas hasta el mar Mediterráneo, pasando por las elevaciones características del Turó de l'Home y les Agudes.

El descenso hacia la Font del Matagalls marca el inicio de la fase circular de la ruta. Esta fuente, situada en un entorno de hayedo centenario, ofrece agua cristalina y un ambiente de frescor que contrasta con la exposición de las cumbres. La construcción de piedra que protege el manantial testimonia siglos de uso por parte de pastores, excursionistas y habitantes de la montaña.

La travesía por el Plà de Ginebre ofrece un paisaje de praderas alpinas salpicadas de hayas monumentales que crean un ambiente mágico, especialmente durante el otoño cuando el follaje adquiere tonalidades doradas espectaculares. Esta sección del itinerario discurre por algunos de los bosques más maduros y mejor conservados del Montseny.

El Turó de Sant Segimon, a 1.407 metros, proporciona vistas excepcionales hacia la Solella dels Dous y marca el inicio del descenso hacia las ermitas que caracterizan la segunda mitad del recorrido. La ermita de Sant Miquel dels Barretons, situada en un emplazamiento espectacular sobre una aguja rocosa, representa uno de los ejemplos más destacados de arquitectura religiosa de montaña en Catalunya.

El monasterio de Sant Segimon, con sus cuevas excavadas en la roca, constituye un conjunto monástico único que ilustra las tradiciones eremíticas medievales en el Montseny. Este lugar, accesible únicamente durante fines de semana y festivos, conserva elementos arquitectónicos de gran valor histórico y espiritual.

La Font de Sant Miquel dels Sants ofrece un último punto de abastecimiento antes del tramo final de retorno. Esta fuente, situada en la Solella de la Mare de la Font, zona caracterizada por la ausencia de sombra, proporciona un alivio esencial durante los meses de mayor calor.

El Turó d'en Bessa, última elevación del itinerario a 1.394 metros, alberga una construcción que parece haber servido como refugio de montaña, aunque actualmente se encuentra en estado de abandono. Esta cima ofrece una perspectiva final sobre el territorio recorrido antes del descenso definitivo hacia Collformic.

Esta ruta circular por el Matagalls representa una síntesis perfecta del montañismo catalán, combinando la ascensión a una cumbre emblemática con la exploración de un territorio rico en patrimonio natural, histórico y cultural. Los 810 metros de desnivel positivo acumulado y las 3 horas y 25 minutos de duración la convierten en una excursión exigente pero accesible, mientras que la diversidad de paisajes, la riqueza patrimonial y las vistas panorámicas garantizan una experiencia memorable para descubrir uno de los territorios montañosos más representativos de Catalunya.